Agustina Bello
¡Abracen la subjetividad!
Agustina Bello nos cuenta sus primeras experiencias como diseñadora, su trayectoria y cómo fue enfrentando distintos retos que le fue presentando la vida.
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Luego de recibirse de diseñadora textil en el 2003, comienza a trabajar como diseñadora con un grupo de amigos músicos, que conforman la banda conocida como “4 pesos de propina”. Diseñan el logo, identidad, posters; convirtiéndose este en su primer trabajo de colaboración.
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Trabaja como asistente de vestuario de Hugo Millán, luego en Johny Walker y posteriormente para Malboro. A pesar de tenido gran éxito laboral.. nos habla sobre sobre su ambición, sobre el deseo de querer “algo más”. Entre idas y vueltas, decide montar un taller de serigrafía en su casa creando de a poco un portfolio. Aplica a un montón de becas y luego de 5 años, logra ingresar a “Rhode Island School of Design” en Providence, Estados Unidos: La primer universidad de diseño en EEUU.
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Volando, con el corazón en Uruguay
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Agustina llega fascinada por esta oportunidad única y siendo esta su primera experiencia viviendo en otro país. Era otro contexto; se iba de un Uruguay muy marcado por la crisis del 2002, a un Estados Unidos con recursos, tecnología desarrollada (con máquinas como la stol y la jackar). Se enfrentaba con una realidad totalmente diferente, con más posibilidades de desarrollo y de enriquecerse como diseñadora y socialmente.
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Realizando su postgrado allí, reconoce su identidad como uruguaya, que aquí nunca había sido valorada. Así como le sucedió a ella, le sucede a mucha gente al viajar, como incluso me sucedió a mi al realizar un intercambio en otro país. Uno logra cierta identificación con el país natal al mudarse a otro lugar, al conocer otra cultura, otra realidad.
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"Los uruguayos venimos de los barcos.. hay una falta de identidad en Uruguay”.
Lo que siente, sus más claros recuerdos sobre Uruguay logran tener una gran influencia en sus trabajos; son su fuente de inspiración. Se da cuenta que existe cierto “realismo mágico”, pero recién lo nota al irse del país.
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Pensaba en Montevideo en invierno: rigidez, lluvia, gris, niebla, baldozas mojadas, ciudad al lado del mar. “Tenemos esa nostalgia por que venga el siguiente febrero, el calor. Las cortezas, la dureza se va abriendo y va permitiendo que salga esa otra cosa, que es lo que somos realmente”.
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De trabajar con estampados pasó a trabajar con tejido de punto. ¿Qué es el material, cuáles son las técnicas que existen? Agustina comienza a reflexionar acerca de todo y se da cuenta que en el diseño: No hay bordes. No hay límites.
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Vestimenta estrechamente vinculada con su "identidad uruguaya"
“Algo re importante sobre diseñadores, artistas, es que el trabajo va mucho en pensar en las preguntas, la parte más conceptual y teórica.. (..) Independientemente de la herramienta hay un alma, hay un hombre, una razón un ser atrás: la tecnología es una herramienta más dentro del proceso”
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Experimenta también con la percepción: materiales que parecen duros pero que en realidad son blandos. Desarrolla una técnica: nil printing, la cual consiste en tejer con hilados termofuncionables y no termofuncionables. “Tejia en la stol, les hacia un montón de carreras con hilados que se derretían, después esta textura 3D se fusionaba y terminaba siendo una textura 2D.” Metamorfosis. Transición. Momento congelado en el tiempo. Agustina busca cómo encontrar el camino expresivo más allá de lo técnico.
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“Uno aprende a aprender”, menciona confiada. Lo único constante es el cambio. Es importante tener métodos para seguir abarcando y desarrollar ideas que nos interesen. Hoy en día esta todo en internet, tenemos acceso a todo. Hay que aprovecharlo.
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Innovación: diseño de un "método"
Agustina empieza a trabajar en converse, en la sección de materiales, junto con un equipo de 8 o 9 personas, que se encontraban en distintos lugares del mundo haciendo distintos proyectos. Uno de ellos consistía en plataformas de desarrollo de innovación y el otro en tecnología de materiales para traducirlas al consumidor.
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Desarrolla una patente; diseña unos championes con materiales multicapa; pero.. más que eso: crea un método de fabricar, un método de hacer.
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"Preprogramás una forma específica, la parte de arriba se corroe y aparecen las figuras que están debajo”. De esta manera, no quedan dos championes iguales y el consumidor genera cierto vínculo con el calzado, son championes personalizados.
Considero son un diseño muy creativo que contiene un "factor sorpresa", a futuro. De esta manera le otorga un valor agregado. Creo que esta técnica tiene mucho potencial pues habilita a dejar volar la imaginación del creativo y el consumidor.
Además, el público objetivo puede ser muy amplio.
Ella lo aplica esta idea en zapatos, pero se pueden hacer adaptaciones con otros diseños o en otros objetos y lograr captar la atención de adolescentes, adultos, y más. Yo creo a muchos nos gusta aquello que se transforma, porque es como la vida misma. Nada es constante, todo cambia, nada es cómo lo es en un principio y.. eso no es algo malo, sino algo que sucede. Yo, personalmente, veo más que unos championes que cambian: veo un reflejo de la realidad.
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Volviendo a las raíces
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La vida le coloca una piedra en el camino y Agustina debe volver a su país natal. Habiendo firmado un contrato de estar un tiempo allá y otro tiempo en Uruguay y notar que era realmente inviable, decide volver, para quedarse. Fallece alguien muy cercando y junto con su novio heredan un taller de confección.
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Así como dice ella y lo creo fervientemente “la vida va pasando y los caminos no son lineales”. En mi opinión la vida va transcurriendo y nos va poniendo distintos retos que debemos superar para poder crecer, para madurar. Nada se puede dar por sentado ya que no sabemos lo que nos puede pasar y a la gente que nos rodea y que en cierta manera “dependemos” para estar bien. Ciertos sucesos pueden hacer que nuestras vidas den un giro de 180 grados y que debamos adaptarnos a una nueva situación. A veces es difícil, a veces no lo es tanto, pero siempre hay que enfrentar todo con el mayor optimismo y positivismo posible y creyendo que todo en la vida sucede por algo, que de todo lo malo algo bueno va a suceder y que “la vida es cuesta arriba, pero el paisaje es genial”; el objetivo es ir creciendo pero disfrutando el aquí y el ahora.
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Ella habla de esa herencia como un desafío muy interesante: pasar de un mundo macroglobal a.. Uruguay: a llevar a cabo un emprendimiento, una realidad financiera distinta. No lo ve como algo negativo sino como parte del camino. “Inicialmente entramos muy románticamente al proceso” y con esto se refiere a que todo era color de rosas en un principio.“Siempre me preguntaba: ¿me voy a arrepentir de esto o no? No. Bueno entonces sigo adelante”. Convencida de sus decisiones, sigue adelante, también encontrando una nueva comunidad con personas creativas que seguían en este país.
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Diseño sustentable
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Cuando Agustina estaba en EEUU tenia el corazón acá y al llegar a Uruguay logró ver lo que había dejado allá y que había quedado impregnado en su corazón.
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“Al estar en eeuu las plantas me acompañaban mucho”. Inicia un proyecto que habla de la relación plantas – personas, que consiste en dónde se colocan las plantas al colocarlas en nuestras casas. Cuenta cómo las plantas son seres vivos que sienten, que al estar en macetas van creciendo sus ramas e intentan romper la superficie rígida en la que se encuentran; lo que provoca que puedan terminar ahorcándose al concentrarse en la profundidad de esta superficie. Existe ya un proceso creado por un agrónomo que consiste en desarrollar materiales sintéticos donde las raíces se meten para adentro y al sentir que hay aire del otro lado, paran de crecer y se ramifican.
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Agustina y su pareja buscan desarrollar un material similar pero orgánico, utilizando la menor cantidad de sintéticos posibles y considerando siempre que pudiera ser producido en este país. Comienza una larga investigación. Luego de varias pruebas con distintos fieltros, haciendo estaciones de monitoreo, ensayo y error, haciendo prototipos funcionales y probando distintas soluciones se llega al resultado deseado: POTECO.
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Champión al comprarlo Champión luego de utilizarlo un tiempo
"Ell uruguayo tiende a ver lo feo. La clave es encontrarse a uno mismo y encontrar a personas que trabajan desde la sensibilidad. Volver a encontrar el amor."
Se compone de un fieltro de 3 capas: Fibras de shute en los bordes, en el medio una membrana de regulación de temperatura y humedad y afuera una estructura textil más fuerte con la menor cantidad de hilado posible. Se patenta en Uruguay pero hoy día se está haciendo la patente internacional.
Poteco promueve un desarrollo sustentable del ecosistema.
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"Somos intelectos"
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A modo de conclusión, Agustina nos deja algunas enseñanzas.
Menciona que, como diseñadores, tenemos un rol dentro de la economía muy importante: estamos encargados de traer objetos al mundo y que estos sirvan para algo. Trabajamos con nuestra subjetividad y creatividad.
Con esto refiere a que todos adentro “somos intelectos” y siendo nosotros mismos es como vamos a trascender las barreras. “Nunca vamos a hablar de algo con tanta verdad como cuando lo hablamos en primera persona”.
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Yo creo que Agustina logra dar una charla en la que capta la atención de todos nosotros y nos deja algo. Es un ejemplo de superación personal y de que lo que uno se propone lo puede conseguir, siempre mirando hacia arriba y enfrentando los desafíos con una sonrisa, viendo el vaso medio lleno.
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Poteco en uso y en sus distintos tamaños y sistema de embalaje.
“Es momento de hablar de sustentabilidad, conexión, personas y trabajando con la subjetividad tendremos más chances de llegar a tocar a otras personas. Mensaje: ¡Abracen la subjetividad!”